El CorreoLa Guardia Civil comunica al juzgado que investiga el caso que no puede cotejar las voces de los imputados con las escuchas porque éstas no tienen calidad suficiente.
El ex alcalde de Camas, Agustín Pavón, en una imagen de archivo.
La Audiencia de Sevilla anuló primero los pinchazos telefónicos practicados en el caso del intento de soborno a la ex concejal de Camas Carmen Lobo, y ahora la Guardia Civil ha informado al juez de que no es posible cotejar las voces de los imputados con las grabaciones privadas que en su día realizaron los denunciantes. El resultado del estudio realizado por los especialistas del área de acústica del servicio de Criminalística de la Guardia Civil y que ha sido remitido al juzgado de Instrucción número 2, implica en la práctica restar otra de las pruebas de cargo que existían contra los acusados. Al no poder cotejarse las voces de los imputados con las que aparecen en las cintas grabadas por los denunciantes, Francisco Gordo y Carmen Lobo, las grabaciones no pueden acreditar que los procesados realizaran las manifestaciones que en ellas se recogen.El informe de la Guardia Civil señala que no ha sido posible comparar las voces porque las grabaciones que en su día realizaron los denunciantes, con reproductores mp3, "no cumplen las condiciones mínimas de calidad" para llevar a cabo el estudio, con independencia de que los agentes han comunicado al juez que van a realizar un análisis fonético-lingüístico de las voces de los imputados: el ex alcalde de Camas, Agustín Pavón, los ex concejales Antonio Enrique Fraile y José del Castillo, y el intermediario en el presunto cohecho, Eusebio Gaviño.La realización de esta prueba de reconocimiento de voz fue acordada en octubre de 2008 por el titular del juzgado de Instrucción número 2 de Sevilla, Carlos Mahón, que consideró que esta pericial era "importante" para la investigación de la causa. De hecho, cuando la Audiencia de Sevilla anuló en mayo del año pasado las escuchas telefónicas policiales explicó que esta declaración de nulidad no podía conducir al archivo del caso -como habían solicitado los abogados defensores-, porque existían otras pruebas como la propia denuncia del caso, una copia del proyecto urbanístico La cornisa de Camas, y las grabaciones audiovisuales realizadas por los denunciantes que no estaban contaminadas.El resultado de la prueba pericial de la Guardia Civil deja al instructor sólo con las manifestaciones de los denunciantes como principal prueba de cargo para esclarecer los hechos denunciados y concretar la posible participación de los imputados en el intento de soborno a la ex concejal Carmen Lobo.El ex alcalde de Camas, Agustín Pavón, consideró ayer que el informe de la Guardia Civil prueba que el caso "se está desinflando" y advirtió de que el ex militante de IU Francisco Gordo entregó las grabaciones "manipuladas" y actuó "con clara animadversión y odio".
La Audiencia de Sevilla anuló primero los pinchazos telefónicos practicados en el caso del intento de soborno a la ex concejal de Camas Carmen Lobo, y ahora la Guardia Civil ha informado al juez de que no es posible cotejar las voces de los imputados con las grabaciones privadas que en su día realizaron los denunciantes. El resultado del estudio realizado por los especialistas del área de acústica del servicio de Criminalística de la Guardia Civil y que ha sido remitido al juzgado de Instrucción número 2, implica en la práctica restar otra de las pruebas de cargo que existían contra los acusados. Al no poder cotejarse las voces de los imputados con las que aparecen en las cintas grabadas por los denunciantes, Francisco Gordo y Carmen Lobo, las grabaciones no pueden acreditar que los procesados realizaran las manifestaciones que en ellas se recogen.El informe de la Guardia Civil señala que no ha sido posible comparar las voces porque las grabaciones que en su día realizaron los denunciantes, con reproductores mp3, "no cumplen las condiciones mínimas de calidad" para llevar a cabo el estudio, con independencia de que los agentes han comunicado al juez que van a realizar un análisis fonético-lingüístico de las voces de los imputados: el ex alcalde de Camas, Agustín Pavón, los ex concejales Antonio Enrique Fraile y José del Castillo, y el intermediario en el presunto cohecho, Eusebio Gaviño.La realización de esta prueba de reconocimiento de voz fue acordada en octubre de 2008 por el titular del juzgado de Instrucción número 2 de Sevilla, Carlos Mahón, que consideró que esta pericial era "importante" para la investigación de la causa. De hecho, cuando la Audiencia de Sevilla anuló en mayo del año pasado las escuchas telefónicas policiales explicó que esta declaración de nulidad no podía conducir al archivo del caso -como habían solicitado los abogados defensores-, porque existían otras pruebas como la propia denuncia del caso, una copia del proyecto urbanístico La cornisa de Camas, y las grabaciones audiovisuales realizadas por los denunciantes que no estaban contaminadas.El resultado de la prueba pericial de la Guardia Civil deja al instructor sólo con las manifestaciones de los denunciantes como principal prueba de cargo para esclarecer los hechos denunciados y concretar la posible participación de los imputados en el intento de soborno a la ex concejal Carmen Lobo.El ex alcalde de Camas, Agustín Pavón, consideró ayer que el informe de la Guardia Civil prueba que el caso "se está desinflando" y advirtió de que el ex militante de IU Francisco Gordo entregó las grabaciones "manipuladas" y actuó "con clara animadversión y odio".
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